Llega el momento… llega el Bodorrio Rural

Ya no queda nada… el evento es esperado y deseado…

En apenas unas horas, comenzará el Bodorrio Rural del año… quien dice del año… DEL SIGLO!!

En el llevamos (sobre todo nuestro familiares) pensando meses… y preparándolo todo para que sea un celebración única… especial.

Nuestra familia está totalmente entregada con nuestra boda, y nosotros somos muy felices viendo la “complicidad” que reina y sobre todo, notando la alegría y el buen rollo rebosante ante el magno evento.

 Ya os contamos la que han liado para darnos los regalos, pero no os podéis imaginar el “cachondeo” que se traían horas antes con mails, SMS y demás medios con mensajes subliminales incluidos:

• Ah? pero hay una boda? pues habrá que preparar algo
• TIC TAC TIC TAC faltan tantos días…
• Oye… que la boda es para el día 2 ¿tenéis ya todo preparado?

Este y otros muchos mensajitos más para demostrar que la familia está “gozando” la boda mucho antes de su celebración… y si os soy sincero… ME ENCANTA QUE ASÍ SEA

Hemos pensado, discurrido y buscado para poder hacer esta boda. Nuestras hermanas, padres y la familia entera ha ayudado para organizar y conseguirlo y sólo puedo pedir una cosa más:

Que todo salga lo mejor posible y que la disfrutéis al máximo y pasemos unas horas llenas de buen humor, buen rollo y mucha felicidad.

Son tiempos duros y queremos que recordéis nuestra boda como algo alegre y lleno de buena energía… para poder usarlo como “cargador de pilas” y seguir luchando día a día.

Ahora comenzará el show y los nervios… tenemos mucho que montar, organizar y preparar…
Los invitados irán llegando y copando sus “aposentos”, para que a las 19:30 comience la ceremonia.

La casa esta lista, la decoración, el PhotoCall, los preparativos y los detalles… (gracias comité de festejos… sois la leche) y la novia… la novia estará preciosa.

El novio o escribiente de este BLOG, estará atacado, nervioso, sudando en su traje en plan “mafioso” pero con el corazón a 1000 por hora. En cada latido estará diciendo gracias. Gracias por poder compartir con ellos este momento… gracias a todos los que han ayudado a organizar esto, gracias a aquellos que han comprendido que no pudimos hacerlo para más que la familia más cercana (la crisis no permite muchos “alardes” económicos a nadie) y gracias a la vida por dejarme encontrar a la mejor persona para compartir toda una vida.

Que suene la música, que llegue el momento y que no paremos de bailar y celebrar el: